Si estás construyendo tu nueva vivienda y tienes pensado incorporar una piscina, estás ante el momento perfecto para hacerla. Como dice el refrán «no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy». En este caso las ventajas son significativas.
Salva tu jardín
El proceso de construcción de una casa puede presentar diversos problemas y ser algo caótico. La maquinaria y trabajadores crean un ambiente a menudo muy ruidoso y concurrido. Esto mismo sucede, a mucha menor escala y dependiendo del método escogido, cuando instalamos una piscina. Sufren los alrededores, sobre todo si hay cesped, plantas… Este es el motivo por el que es una idea genial instalar una piscina antes que todos los elementos del jardín, cuando en tu parcela no hay nada todavía. Realmente es la mejor opción, y seguro que tus plantas te lo agradecerán.
Salva tus accesos de vehículos y peatones
Seguro que lo último que quieres es arriesgarte a romper tus accesos y zonas de paso cercanas a tu piscina, debido a las maquinas de construcción que usamos para construir tu piscina. En estos casos el responsable es el propietario. Para prevenir esto, programa que se instale tu piscina antes que todos estos acabados, o controla muy bien todo el proceso constructivo para que no se produzca ningún desperfecto, algo que en muchas ocasiones es inevitable.
Ahorra en electricidad y fontanería
Informa al electricista que está trabajando en tu nueva vivienda que vas a instalar una piscina para que deje todo previsto. Lo mismo sucede con el fontanero. Esto te ahorrará muchos costes y facilitará el trabajo a la empresa encargada de construir la piscina.
Disfruta tu piscina desde el primer día
Quizá la mejor razón para llevar a cabo la piscina durante la construcción de la casa es para su disfrute instantaneo. Podrás disfrutar tu nueva casa y tu nueva piscina en el mismo momento. ¿Para qué esperar si no es necesario?
Fuente: Lathampool