Los especialistas de nuestra tienda de piscinas online advierten que el agua de una piscina, ese oasis refrescante en los días calurosos, puede dejar de ser una fuente de diversión si no se pone en marcha una atención diligente para mantenerla en óptimas condiciones. Además, los signos de contaminación pueden pasar desapercibidos, pero las consecuencias pueden ser graves.
Pero ¿cómo saber si el agua de tu piscina está contaminada y de qué forma podemos evitarlo? ¡Presta atención!
Reconociendo los signos más evidentes
El agua turbia y con un color inusual, puede ser un indicador de problemas. Por ejemplo, la presencia de algas, depósitos de suciedad en las paredes y el fondo de la piscina, así como la formación de espuma, son señales de que algo anda mal.
Olor y sabor anormal
Si el agua de la piscina tiene un olor fuerte y desagradable similar al cloro, puede ser un síntoma de presencia de contaminantes de que hay demasiados contaminantes en ella. Del mismo modo, si el agua tiene un sabor extraño o desagradable, es una señal de advertencia.
Irritación en piel y ojos
La exposición a una piscina contaminada puede causar irritación en la piel, los ojos e incluso problemas respiratorios. ¿Experimentas enrojecimiento, picazón o irritación después de nadar? Si la respuesta es afirmativa, lo más probable es que el agua esté contaminada.
Más vale prevenir que curar, especialmente en medios acuáticos
Sin duda, el agua contaminada no tratada puede acabar convirtiéndose en un verdadero problema. Y es que un medio acuático es el entorno ideal para que algas, hongos y otros microorganismos dañinos proliferen, especialmente si no se toman medidas básicas. En este sentido, desde Argos Piscinas recomendamos las siguientes acciones:
Pruebas químicas regulares
Realizar pruebas periódicas del agua de la piscina es fundamental para garantizar que todo está en orden. Para ello, ponemos a tu disposición kits de prueba con los que puedes medir los niveles de cloro, pH, alcalinidad y otros parámetros importantes. Si los resultados de las pruebas están fuera de los rangos recomendados, es probable que el agua esté contaminada.
Concienciando al usuario
Los usuarios también deben ser conscientes de las diversas fuentes de contaminación que pueden afectar el agua de la piscina. Porque además de los propios nadadores, elementos como el aire, la lluvia, el agua de llenado y los productos químicos mal utilizados para el mantenimiento pueden introducir contaminantes en el agua.
Limpieza y cuidados constantes
Ante la posibilidad de contaminación, es fundamental tomar medidas preventivas y correctivas para mantener la calidad del agua de la piscina. Por ello, también ofrecemos productos y accesorios de la más alta calidad para el mantenimiento, limpieza y cuidado diario de las piscinas.
Desde bombas de calor de última generación hasta cloradores salinos, filtros de purificación y tabletas desinfectantes, nuestra amplia gama de productos está diseñada para garantizar que tu piscina esté siempre en óptimas condiciones.
Por último, ¡recuerda! La llegada del buen tiempo es el momento perfecto para realizar una limpieza a fondo y preparar la piscina para el verano.
Así que anticípate y no dejes que la contaminación arruine tu experiencia estival. ¡Consulta nuestra oferta y contacta con nosotros! Resolveremos todas tus dudas.
